El pasado mes de octubre el centro colaboró con una recogida masiva de ropa y calzado para enviar a África y poder atender así las necesidades básicas de los más necesitados. Toda la comunidad educativa se implicó mucho en esta iniciativa y gracias a su generosidad y altruismo han hecho posible la felicidad de muchas personas y niños que carecen de las necesidades básicas para tener calidad de vida.
Como ya es habitual para cerrar un duro curso y empezar la etapa del año que más gusta a los niños que son las vacaciones del verano, todos los años el centro organiza una lluvia de color, alegría y música. Cada curso demuestra sobre el escenario sus habilidades y destrezas bailando. Algunos son verdaderos genios de la coordinación y el equilibrio.